HINOJOSA, Maria ©May Zircus
La soprano María Hinojosa protagoniza la obra con libreto de Marc Rosich sobre textos de Fátima Frutos
El jueves 28 de octubre (Petit Palau, 20 h), dentro del ciclo Palau Fronteres, el Palau de la Música Catalana acogerá el estreno absoluto de la ópera de cámara Andrómeda encadenada de Agustí Charles, con libreto de Marc Rosich a partir del poema homónimo de la autora vasca Fátima Frutos. Con una puesta en escena de Jordi Pérez Solé, dirección musical de José Rafael Pascual-Vilaplana y protagonizada por la cantante María Hinojosa, Andrómeda encadenada es una ópera de un solo acto en forma de monodrama para soprano, con violín amplificado, arpa, percusión y electrónica en vivo (con la incorporación del ePad-Wood, un nuevo instrumento de percusión electrónico creado por el propio compositor). Ésta es una producción de Òpera de Butxaca i Nova Creació, con la colaboración del Palau de la Música Catalana.
El significado originario de la palabra “andrómeda” es “mujer que lo puede todo”. Andrómeda encadenada parte del poema homónimo de la escritora donostiarra Fátima Frutos, en el cual la autora toma el viejo mito de la mujer encadenada en las rocas y salvada por Perseo y hace una lectura en clave personal, contemporánea y, sobre todo, feminista. El libreto de Marc Rosich transforma los versos dramáticos del poema en un monólogo cantado en el que también se incluyen otros textos extraídos de varios poemarios de Frutos, así como citas de poetas clásicos, como Lope de Vega o Calderón de la Barca, dedicados al personaje mitológico. María Hinojosa pone voz a una mujer en crisis después de una ruptura, pero que, refugiándose en la lectura de los clásicos, y sobre todo en la reinterpretación del mito de Andrómeda, acaba encontrando una vía para desprenderse de los lazos de dependencia sentimental y así autoafirmarse.
Con esta nueva creación, Agustí Charles presenta su última obra lírica, en la que pone a prueba todos los aspectos tecnológicos aplicados a la composición en la que ha trabajado últimamente. El resultado es una obra que contiene un lenguaje imaginativo ya la vez tremendamente actual; por eso se utilizan instrumentos nuevos, construidos por el propio compositor, con sistemas de computación Arduino, mediante sensores de movimiento, y otros útiles de reproducción y modificación del sonido en directo, tanto de la voz como de los instrumentos. Con esta tecnología el compositor quiere desarrollar un lenguaje musical basado en la integración del sonido de una forma inmersiva, con el que el público sienta de cerca el impacto del drama para vivir una experiencia única.
El manresano Agustí Charles inició sus primeros trabajos en la composición musical seria en la década de 1980, con Miquel Roger, Albert Sardà y Josep Soler. Posteriormente estudió con Franco Donatoni, Luigi Nono y Samuel Adler, además de trabajar con Joan Guinjoan, Cristóbal Halffter, José Ramón Encinar y Antoni Ros Marbà, entre otros. Tiene cerca de cincuenta galardones, entre los que destacan los más importantes premios de composición nacional e internacional. También ha recibido encargos de muchas instituciones y prestigiosos intérpretes, por lo que su música se interpreta en todo el mundo. Con un catálogo de más de 250 composiciones, su obra abarca música de cámara y orquestal, música vocal e instrumental, coral y ópera. Su producción operística consta de cinco óperas de cámara –la primera, La Cuzzoni, esperpento de una voz, fue estrenada con gran éxito en el Staatstheater de Darmstadt (Alemania) en octubre del 2007– y una gran ópera, Lord Byron, un verano sin verano, encargada por el Staatstheater de Darmstadt y estrenada en este teatro en 2011 con gran éxito de público y crítica; con texto de Marc Rosich y dirección escénica de Alfonso Romero, posteriormente se presentó en el Gran Teatre del Liceu. También es autor de numerosos trabajos relacionados con la composición y el análisis musical. Charles es doctor en historia del arte y catedrático de composición en el Conservatorio Superior de Música de Aragón, así como profesor de orquestación en la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid.
 
Fátima Frutos siente pasión por su tierra y el arte de todos los tiempos. Gran enamorada de la historia, la filosofía y la cultura alemana, ha estudiado parte de la poética y la literatura germánica, vasco-navarra, rusa, cubana y castellana. Con el poemario Andrómeda encadenada (Editorial Alberdania), editado en 2011, Frutos ganó el mismo año el Premio Kutxa Ciutat d'Irun, uno de los más prestigiosos en lengua castellana. Con seis obras publicadas, desde 2016 ocupa la Presidencia de la Asociación Navarra de Escritores y Escritoras.
(fotografía de María Hinojosa ©May Zircus)

El Petit Palau acoge el estreno absoluto de la ópera de cámara ‘Adrómeda encadenada’ de Agustí Charles